Por: Imilka Fernández.
El pasado 29 de enero, tal y como habíamos anunciado en nuestras redes, se celebró en la Biblioteca de la Universidad Internacional de La Florida, FIU un merecido homenaje al luthier de guitarras de concierto Pablo Quintana. Gracias a la excelente colaboración de esta institución académica, a la Colección de Música Cubana y Latinoamericana Díaz Ayala, especialmente en la persona de Verónica González y al Centro Cubano de Investigaciones (CRI) este evento alcanzó el éxito esperado.
Para nosotros fue un verdadero honor y una gran bendición habernos encontrado en esta tierra con Pablo Quintana y desde el momento justo en que lo contactamos y le hicimos la propuesta de realizar un documental para hacer reconocimiento a su obra y salvaguardar su legado como luthier, nos permitió adentrarnos en su vida, en su familia, en su historia y estar bastante cerca de sus secretos. Supimos entonces que Pablo no era grande sólo por sus guitarras sino también porque es un hombre de un alma transparente y de gran bondad.
En el homenaje muchos de los allí invitados supieron de la trascendencia y de la importancia de las guitarras Pablo y de sus más de 50 años de labor para el perfeccionamiento de este instrumento que tantos estudiantes y guitarristas cubanos tuvieron en sus manos para trabajar el sonido, las obras musicales, los imprescindibles de lujo de la música como los timbres, la afinación, los matices y como el tener en sus manos un buen instrumento fue determinante para ser reconocidos internacionalmente en concursos y festivales realizados en el mundo entero.
Video dedicado a Pablo Quintana.
Por otra parte el legado de Pablo y sus guitarras propone una contribución importante desde una perspectiva organológica para la construcción de este instrumento, que deja como testimonio de una investigación bien fundamentada desde el punto de vista teórico y práctico, que al mismo tiempo es conectado, por primera vez, en el mundo como una guitarra de hechura cubana.
Es por eso que el legado de Pablo Quintana queda de forma evidente y tangible en la construcción de estas guitarras que han servido y servirán de referencia como objeto de estudio y análisis para las futuras generaciones que estén interesadas en la guitarrería y su construcción.
Pero también hubo otro gran homenajeado en la noche por su importante participación en la creación de las guitarras Pablo, el guitarrista cubano Ildefonso Acosta, fiel compañero del matancero luthier, acompañante activo en altas horas de la madrugada y dueño del pensamiento y del lenguaje de todo este gran experimento. Es Ildefonso un co-creador en toda regla de estas excelentes guitarras. Su necesario roll en el estudio físico-acústico de manuales que recopilaba en sus viajes por el mundo, sus pruebas y experimentos del sonido en el Teatro Sauto de Matanzas, su préstamo incondicional de las mejores guitarras del momento y la gestión constante que realizó para que se supiera del logro de esta nueva guitarra fueron más que imprescindibles para el nacimiento, perfeccionamiento y difusión de las Pablo. El reconocimiento a su significativa contribución el maestro Ildefonso Acosta lo va a recibir en Cuba, no pudo participar de este homenaje porque se encontraba delicado de salud, pero a través de una llamada telefónica supo del agradecimiento de todos los allí presente por su feliz intervención en las guitarras Pablo.
Algunos instantes del homenaje a Pablo Quintana.
Como parte del programa, también tuvimos la suerte de contar con la participación de varios de nuestros guitarristas quienes aprovecharon para homenajear a Pablo desde su guitarra y con música. Félix Puig se presentó con dos de sus pequeños alumnos, Teresa Madiedo y Carlos Molina también ofrecieron su música para el maestro y Gerardo Pérez, su actual probador de guitarras en la ciudad Port Charlotte, nos regaló tres obras pequeñas tocadas con un excelente gusto y con gran destreza, dedicándole unas sinceras palabras al maestro luthier.
Muy emotiva en esta velada fue el reencuentro de varios guitarristas que viajaron millas e incluso cruzaron el mar, como lo hizo el puertorriqueño Iván Rijos, para saludar al maestro en este día tan especial. También honraron este evento con su presencia relevantes músicos de la talla de Miguel Bonachea, Gerardo Pérez, Carlos Molina, Rafael Padrón o Teresa Madiedo que momentos más tarde nos deleitaron con su música.
Como colofón del evento, se exhibió el tráiler del documental que aún no está terminado “Pablo Quintana: el secreto de un luthier”, realizado y producido por Worldwide Cuban Music en colaboración con un equipo de profesionales y de grandes amigos que se han entregado a la labor con gran pasión. Este documental, que se encuentra en la fase de edición final, contempla grabaciones realizadas en La Habana, Matanzas, Port Charlotte y Miami, con testimonios de excelentes exponente de la guitarra cubana El guajiro Miranda, Luis Molina, Jesús Ortega, Leo Brouwer e Ildefonso Acosta, con interesantes reflexiones sobre la evolución de la guitarra, su perfeccionamiento, su participación en el Festival y Concurso Internacional de Guitarra de La Habana, su relación con la Fábrica de Instrumentos Fernando Ortíz y muchas otras. El público presente recibió con agrado este último detalle del programa y quedó con ganas de conocer un poco más del documental.
En sentido general, fue una noche maravillosa. Lo más logrado y realmente el mayor éxito de la jornada fue la expresión de felicidad de Pablo, quien hizo gala en todo momento de su humildad y de la nobleza de su espíritu.
Tráiler del documental Pablo Quintana: el secreto de un luthier.
Nosotros contentos con cumplir con esta misión tan hermosa: honrar a un grande de nuestra Cuba que nos deja una gran obra, con la que ha defendido una pasión sin límites, donde cada guitarra es una pieza única, realizada con mucha dedicación y con una historia hermosa que sólo nos habla de un inmenso amor.
Gracias maestro Pablo Quintana por no rendirse nunca.
Imagen: Pablo Quintana. Fotografía de Viviam María.
Debe estar conectado para enviar un comentario.